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Recetas paso a paso

Hummus con verduras

El hummus con verduras es una deliciosa y saludable opción para tus comidas! Con un cremoso hummus de garbanzos y una variedad de verduras crujientes y coloridas, esta receta es una explosión de sabores y texturas. ¡Perfecto para una cena ligera o como aperitivo!

Por qué te encantará esta receta

  • Explosión de nutrientes - Esta deliciosa opción no solo es una fuente increíble de vitaminas y minerales, sino que también es muy nutritiva. ¡Salud en cada bocado!
  • Ideal para compartir - Sorprende a tus amigos con una opción vegana que todos disfrutarán. ¡Ideal para cualquier reunión!
  • Versatilidad al máximo - ¿Aburrido de las mismas guarniciones? Este hummus con verduras se puede combinar con panes, crackers o incluso como aderezo. ¡Crea tus propias combinaciones!

Los ingredientes que harán magia en tu cocina

Para que tu hummus con verduras sea un éxito rotundo, he aquí los protagonistas que no pueden faltar en tu encimera. ¡Manos a la obra!

  • Garbanzos – Ya sean garbanzos secos que hayas mimado en remojo y luego cocido con paciencia, o esos prácticos garbanzos en lata que te sacan de un apuro. Yo, cuando el reloj me lo permite, disfruto preparándolos desde cero; el sabor es incomparable y, además, ¡mi bolsillo lo agradece!
  • Tahini – Ese toque exótico y sedoso viene de la mano del tahini. Si no lo has probado, te invito a que lo descubras y te enamores de su textura única.
  • Aceite de oliva virgen extra – El alma del Mediterráneo en tu plato. Un chorro generoso y tu hummus brillará con luz propia.
  • Zumo de limón – No escatimes en él, su chispa ácida es el contrapunto perfecto para los sabores profundos del dip de garbanzos.
  • Ajo – ¿Eres de los que no temen al aliento de dragón? Atrévete con un diente... o dos. Si prefieres sutilezas, un toquecito bastará para despertar el carácter de tu creación.
  • Comino – Un pellizco de comino y adiós a los remordimientos; no solo es delicioso, sino que cuida de ti y de los tuyos.
  • Sal – La chispa que enciende los sabores, imprescindible para que tu hummus cante al paladar.

Y para el toque final, una orquesta de vegetales frescos: zanahorias crujientes, pepinos refrescantes, pimientos coloridos... Tú eliges los instrumentos para que tu sinfonía de verduras sea inolvidable.

¡Vamos a por el hummus más cremoso y delicioso que hayas probado nunca! Si eres un apasionado del hummus como yo, sabrás que la clave está en la preparación de las legumbres.

Recuerdo cuando descubrí el secreto de un hummus perfecto: remojar y cocer los garbanzos desde cero. Desde entonces, no hay vuelta atrás. Sin embargo, si estás en un apuro, los garbanzos en lata también pueden dar buenos resultados. Solo asegúrate de escurrirlos bien antes de utilizarlos.

Una vez tengas tus garbanzos listos, es hora de mezclarlos con el resto de ingredientes en la batidora. Yo suelo añadir un poco de agua para conseguir la textura perfecta, ¡pero tú decides cuán cremoso quieres que quede tu hummus!

Además, si quieres darle un toque diferente, puedes sustituir el aceite de oliva por aceite de sésamo o agregar especias como pimentón o cúrcuma. ¡Deja volar tu creatividad y disfruta de tu propia versión de hummus!

Preparación de las verduras: ¡dales vida a tus platos!

¡Hola, cocineros y cocineras! Preparar las verduras para acompañar nuestro delicioso hummus es una tarea sencilla y divertida. Yo, personalmente, disfruto mucho eligiendo las verduras más coloridas y frescas del mercado. ¿Quién dijo que comer sano tenía que ser aburrido?

Lo primero que debes hacer es lavar bien las verduras bajo el grifo. Recuerda que, aunque vayamos a pelar algunas de ellas, es importante eliminar cualquier resto de suciedad o productos químicos. Una vez limpias, sécalas con un paño de cocina o déjalas escurrir en un colador.

Corta en trozos del tamaño deseado. Recomiendo hacerlos más grandes si sirves el aperitivo y más pequeños si es guarnición para una comida principal. ¡Pero recuerda, no hay reglas fijas!

Una vez cortadas, puedes cocinar las verduras al vapor, hervirlas o asarlas en el horno. Prefiero asarlas para que queden más crujientes y adquieran un sabor tostado que combina perfectamente con él. Si te animas a probar esta opción, puedes rociarlas con un poco de aceite de oliva y espolvorearlas con sal y pimienta antes de hornearlas.

¡Y ya está! Tus verduras están listas para acompañar tu dip de garbanzos casero. Si quieres darle un toque extra de sabor, puedes añadir hierbas aromáticas como el perejil o el cilantro picados. También puedes experimentar con especias como el comino o el pimentón para darle un toque picante.

Y recuerda, el hummus con verduras es una opción perfecta para una cena ligera, un picnic o una reunión con amigos. ¡Anímate a probar diferentes combinaciones y disfruta de esta deliciosa receta!

¡Ahora llega mi parte favorita! Presentar tu delicioso hummus con verduras de manera atractiva y apetitosa.

Recuerdo cuando organizaba mis reuniones de amigos en casa, siempre me encantaba presentar mis platos de manera creativa y original. Con esta receta, no solo sorprenderás a tus invitados por su sabor, sino también por su presentación.

Mi truco para lograr una presentación perfecta es moldear con una cuchara el contenido de un bol o plato hondo. Luego, las distribuyo alrededor y en el centro, creando un contraste de tonalidades y texturas. ¡No olvides espolvorear un poco de comino molido y perejil picado por encima para darle un toque final!

Si quieres ir un paso más allá, puedes decorar el plato con unas hojas de lechuga y unos tallos de cebollino. Además, acompaña tu hummus con verduras con pan de pita recién tostado, crackers o palitos de verduras. ¡Tus invitados no podrán resistirse!

Receta

Hummus con verduras

Tiempo de preparación: 30 minutos

Una deliciosa receta de hummus casero acompañado de una variedad de verduras frescas y crujientes.

Ingredientes

  • 250 g de garbanzos cocidos (o una lata de garbanzos escurridos y enjuagados)
  • 2 cucharadas de tahini
  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • El zumo de 1 limón
  • 1 diente de ajo, pelado y picado
  • 1/2 cucharadita de comino
  • 1/2 cucharadita de sal
  • Una pizca de pimienta negra
  • Agua para ajustar la consistencia
  • Para servir: zanahorias, pepinos, pimientos, y otras verduras de tu elección, cortadas en bastones o en rodajas

Instrucciones paso a paso

  • Coloca los garbanzos, el tahini, el aceite de oliva, el zumo de limón, el ajo, el comino, la sal y la pimienta en un procesador de alimentos o una licuadora.
  • Procesa los ingredientes hasta obtener una pasta gruesa. Si la mezcla está demasiado espesa, añade agua poco a poco hasta conseguir la consistencia deseada.
  • Prueba y ajusta el sabor según sea necesario, añadiendo más sal, comino, zumo de limón o tahini si lo deseas.
  • Transfiere a un bol y sirve con las verduras cortadas en bastones o en rodajas.

Notas:

  • Si utilizas garbanzos secos, recuerda remojarlos durante al menos 8 horas antes de cocinarlos. Esto ayudará a ablandarlos y facilitará su digestión.
  • Si no tienes tahini, puedes sustituirlo por más aceite de oliva o por mantequilla de cacahuete natural.
  • Para darle un toque extra de sabor, puedes añadir una cucharadita de pasta de ajo o de pimiento rojo.
  • Se puede conservar en un recipiente hermético en el frigorífico durante 3-4 días.