Hummus de calabaza
¡El hummus de calabaza es tu nueva salsa favorita! Es muy fácil de hacer, sano, delicioso y solo tardas 10 minutos en prepararlo de principio a fin.
Los ingredientes
Para esta irresistible calabaza que te va a enamorar, vas a necesitar una combinación de sabores y texturas que harán bailar tus papilas gustativas. El asado, con su dulzura y suavidad, será el protagonista de esta fiesta culinaria. No olvides el tahini, esa maravilla de pasta de sésamo que nos regala una cremosidad inigualable. Y, cómo no, los garbanzos, que son el alma de cualquier dip de garbanzos digno de tal nombre. Añade a esta mezcla un generoso chorro de oliva, el imprescindible zumo de limón para ese contrapunto ácido, ajo al gusto (¡a mí me encanta ponerle un montón!), y especias como el comino y la sal, que son la guinda del pastel.
- Calabaza asada – Escoge una calabaza que al asarla te regale ese sabor único y caramelizado que tanto nos gusta.
- Tahini – Esencial para conseguir esa textura sedosa y un sutil toque a nuez que te hará suspirar.
- Garbanzos – Tanto si los cocinas tú mismo como si optas por la comodidad de los de bote, son el pilar de nuestra receta.
- Aceite de oliva – No escatimes en calidad, porque un buen aceite es sinónimo de sabor y la clave para una perfecta emulsión.
- Zumo de limón – Solo unas gotitas y verás cómo se equilibra la dulzura de la calabaza, ¡es magia pura!
- Ajo – Tú decides la cantidad, pero te recomiendo que no te quedes corto, el ajo le da un carácter increíble.
- Comino – Una pizca de esta especia y tu dip de garbanzos pasará de ser bueno a ser memorable.
- Sal – El toque final que realza y despierta todos los sabores, ¡no puede faltar!
¡La calabaza asada es mi debilidad en otoño! Me encanta su sabor dulce y caramelizado, ¡es perfecta para el hummus! Pero, antes de nada, vamos a ver cómo elegir y cortar la calabaza para conseguir el mejor sabor.
Cómo elegir y cortar: Al comprar, busca una con piel suave y sin magulladuras. Además, asegúrate de que suene hueca al golpearla, eso significa que está madura. Para cortarla, utiliza un cuchillo grande y afilado. Primero, córtala por la mitad y luego quita las semillas y los filamentos. Después, córtala en trozos más pequeños para facilitar su asado.
Asar la calabaza en el horno y tiempos de cocción: Precalienta el horno a 200°C. Coloca los trozos en una bandeja de hornear forrada con papel vegetal. Rocía un poco de aceite de oliva y espolvorea sal y pimienta al gusto. Hornea durante 30-40 minutos, o hasta que la calabaza esté tierna y caramelizada. ¡Listo!
¡Es hora de darle vida a este delicioso hummus de calabaza! En tu batidora, combina la calabaza asada, los garbanzos, el tahini, el aceite de oliva, el zumo de limón, el ajo y las especias. Yo te recomiendo que añadas el ajo poco a poco, para que puedas controlar el sabor y evitar que sepa demasiado fuerte. Además, no olvides probarlo antes de servirlo y ajustar la sal y el comino a tu gusto.
Si quieres que tu hummus tenga una textura más suave y cremosa, no dudes en añadir un poco de agua o aceite de oliva extra mientras lo bates. ¡Verás cómo queda espectacular!
¡Ahora que has creado este delicioso hummus de calabaza, es hora de pensar en cómo presentarlo y qué acompañamientos puedes servir con él!
Personalmente, me encanta servir el hummus de calabaza en un bol poco profundo y decorarlo con un chorrito de aceite de oliva virgen extra, un puñado de semillas de sésamo tostadas y unas hojas de perejil fresco. Esta presentación no solo es bonita a la vista, sino que también añade un toque extra de sabor y textura.
En cuanto a los acompañamientos, ¡las opciones son infinitas! Aquí tienes algunas ideas:
Pan pita o pan árabe: no hay nada como mojar pan caliente en un bol de hummus cremoso. Si quieres ir un paso más allá, puedes tostar el pan en el horno antes de servirlo.
Verduras crudas: palitos de zanahoria, apio, pepino y cherry tomates son excelentes opciones para sumergir en él. Además, añaden un toque de color y frescura.
Papas fritas caseras: sí, lo has oído bien. El hummus es una alternativa más saludable a la salsa para tus papas fritas. Además, el contraste entre la textura crujiente de las papas y la suavidad es simplemente delicioso.
¡No dudes en experimentar con diferentes presentaciones y acompañamientos para encontrar tu combinación favorita!
Receta
Hummus de calabaza
Tiempo de preparación: 15 minutos (sin contar el tiempo de asado de la calabaza)
Una deliciosa y cremosa variación del tradicional hummus, con el toque dulce y suave de la calabaza asada.
Ingredientes
- 2 tazas (aproximadamente 400 g) de calabaza asada
- 1 taza (200 g) de garbanzos cocidos
- 3 cucharadas (45 ml) de tahini
- 2 cucharadas (30 ml) de aceite de oliva virgen extra
- El zumo de 1 limón (aproximadamente 30 ml)
- 2 dientes de ajo, pelados
- 1 cucharadita de comino molido
- 1/2 cucharadita de sal
- Agua para ajustar la textura, si es necesario
Instrucciones paso a paso
- En un procesador de alimentos o batidora, combina la calabaza asada, los garbanzos, el tahini, el aceite de oliva, el zumo de limón, el ajo, el comino y la sal.
- Procesa los ingredientes hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si el hummus está demasiado espeso, añade agua poco a poco hasta alcanzar la textura deseada.
- Prueba y ajusta los condimentos según tu preferencia. Si quieres más sabor a limón, añade un poco más de zumo. Si prefieres un más salado, agrégale un poco más de sal.
- Transfiere a un bol y sirve con tus acompañamientos favoritos, como pan de pita, crudités o crackers.
Notas:
- Si no tienes calabaza asada a mano, puedes usar puré de calabaza enlatado o congelado, pero el sabor no será tan intenso y caramelizado.
- Para una presentación más atractiva, puedes decorarlo con semillas de sésamo tostadas, aceite de oliva y pimentón ahumado.
- La calabaza se conserva en la nevera hasta 4 días en un recipiente hermético.